onde no hay mañana no tiene
sentido la memoria, y en estos días el recordar es cosa de viejos lelos, como
yo. Quedamos pocos con recuerdos del mundo anterior. Quedamos pocos con esta
absurda manía de recordar. Ya solo quedo yo de aquel grupo que
llegamos juntos a refugiarnos en este rincón, donde quedaba gente y parecía posible
la vida o algo parecido a la vida anterior.
Donde no hay esperanza no
tiene sentido la ley ni acuerdo ninguno de organización social. Donde no se
espera nada, justicia es un concepto vacío.
El año de las dos primaveras
fue aquel en que se evidenció el tan anunciado caos. A partir de entonces todo se
nos vino encima muy deprisa. Aquel fue un año de récords, de lo que entonces se
consideraban récords: el invierno más seco y el verano más caluroso desde que
había registros; también se quemaron más bosques que nunca antes y hubo más
ciclones y más inundaciones.
Y sí, en realidad ese año
hubo dos primaveras. A mediados de agosto las plantas caducifolias habían
perdido sus hojas o las tenían ya secas. Finalizando el mes bajaron algo las
temperaturas y las yemas del año siguiente comenzaron a abrirse. En septiembre
estábamos en plena floración primaveral. Los insectos polinizadores no pudieron
adaptarse al cambio, pero algunas plagas de chupadores y de hongos se
desarrollaron con desusada violencia.
Fue la primera primavera sin algarabía
pajaril.
Y el invierno no llegaba.
Después fue esta nada en
espera de la muerte.
Lo de las dos primaveras ¿es por las dos elecciones que nos vamos a cascar? Porque si es así y no le ponemos remedio, años de tres primaveras vamos a ver...
ResponderEliminarNo trivialices, que el asunto es serio. Para los de mi quinta menos...
EliminarQuerido Pedro, no tengo tu cercanía a la naturaleza y no he apreciado las dos primaveras. Es un síntoma de la destrucción del clima que estamos haciendo. La estamos convirtiéndola en un monstruo, que terminara engulléndonos a todos.
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EliminarAún no nos han llegado las dos primaveras, pero sí hay signos de cambios; lo que unido a las predicciones de los científicos nos abre un panorama muy preocupante.
Abrazo.